El poder corrompe.
Partiendo de esta
afirmación, me veo llevado a reflexionar sobre la situación actual de la
corrupción en los países democráticos.
Según la propia definición de democracia dada anteriormente
(predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado), el poder lo tiene
el pueblo. Pero me es totalmente imposible vislumbrar una realidad en la cual
sea el pueblo el corrupto. Dado este contexto, nos moveríamos más por la
definición de demagogia que por la de democracia.
Es en este momento de mi reflexión cuando me planteo la naturaleza
del propio poder corruptor. En el caso de existir corrupción en un gobierno
democrático, ¿no implicaría ello que el poder no es estrictamente del pueblo,
sino que es la máscara de una oligarquía o sucedáneo?
Mi conclusión con respecto a este tema concluye en que es
imposible la democracia en un sistema corrupto de gobierno. Podrían añadirse
tintes filosóficos al asunto, pero considero oportuno tratar los temas de una
forma lo más breve posible.
Por supuesto, esto no es más
que una entrada de opinión y no pretende (ni mucho menos) criticar o
dogmatizar. Cualquier comentario con ánimo de mantener un debate constructivo
será bienvenido.
Los debates siempre tiene que ser constructivos y respetuosos. Me parece bien. Por cierto, la foto de portada es muy buena.
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